Simios en la ciudad

Se nos otorgo el lenguaje, se nos dieron signos para expresarnos.

Nos creímos el cuento, nos quedamos callados.

Perdidos en la jungla, un gran laberinto en nuestra mente.

Lo incapaz, se presenta, en base a la capacidad. ¿Incapaz o incapacitado?

Somos monos con tijeras, títeres del que dirán.

Angustiados por lo que nunca pasa, y mas aun, por cada acción realizada.

Simios ignorantes, imposibilitados, bloqueados y estereotipados.

Deberíamos ser llevados a la jungla, sin cemento, y dejarnos en el olvido de algún creador.

Tenemos mas de lo que queremos, valoramos en nuestra escapa según, ¿Que?

Marcamos con el dedo, damos la espalda. Corremos a escaparnos.

Miramos la paja en el ojo ajeno, estamos ciegos de nuestro propio maizal.

Nos damos pena, nos damos asco. Nos repelemos. Codiciamos lo que no conocemos.

Recordamos queriendo ser mas, las historias de nuestros tatarabuelos. Pero en nuestras bitácoras, relatamos cosas inexistentes y vacías de fundamento.

Nos repelemos. Nos odiamos, nos destruimos. El juego siempre vuelve a comenzar.

Procedemos por amor al odio, pelear es mas fácil que razonar.

Dejar de lado la mente rancia, airear el corazón, sacar a pasar a la razón.

Y por eso, mas que nada, nos maldigo por malditos sujetos hablantes de mierda.

Deja un comentario